viernes, 28 de mayo de 2010

Las Neurociencias de la Solidaridad (dedicado a Paco-Bici)

(un texto de Agustín Antúnez Corrales)



1.- Las paradojas del destino

Las paradojas del destino nos han colocado, sin duda, en una situación prometedora o, incluso muy prometedora. Las paradojas del destino han querido que convivamos con dos huéspedes "irreconciliables". Una crisis "de caballo" y una ciencia "de lujo".

Una crisis "de caballo" que había sido prevista "con pelos y señales" por multitud de expertos. Entre ellos Ramón Fernández Durán, en su libro: "El Tsunami Urbanizador español y Mundial", que en pocas páginas te pone delante de los ojos un conjunto de datos muy esclarecedores, para concluir acerca de los peligros del estallido de la burbuja.

Bien, la burbuja estalló, la de aquí y la global, aunque parece como novedad que también tiene pintas de hundirse la antigua fortaleza económica europea, situada en pleno corazón del imperio, con lo que ya nos está indicando los derroteros hacia donde nos encaminamos; o nos encaminaríamos, de no tener presente las múltiples alternativas, no solo posibles, sino probables y hasta seguras.

Posibles porque pueden ser aplicadas en muchos lugares.

Probables porque al haber sido ya aplicadas en múltiples lugares, de este mundo tan interconectado, es más que probable que, expoleados por la encrucijada en la que nos encontramos, se apliquen pronto o muy pronto en muchos otros lugares, para de camino que se crean muchos puestos de trabajo, conseguimos sacar la economía real del pozo donde, como era perfectamente previsible, nos han querido colocar estos chavales.

Seguras porque si realmente existen multitud de alternativas de aplicación fácil y directa, para salir del atolladero, y éstas se han aplicado con éxito en otros muchos lugares, es de esperar que sean cuanto antes aplicadas en los lugares en los que aún no se habían aplicado.

2. Una glocalidad

Estas aproximaciones anteriores se podrían concretar a un territorio, la provincia de Málaga, y a un sistema, al de transportes. Así podríamos ver cuáles son las alternativas aplicadas por las instituciones, y cuales son las que, aún siendo mucho más eficientes para resolver los problemas del transporte, no se han aplicado. Aún.

Entre las primeras tenemos el tren de alta velocidad, el metro, autopistas, autovías, ampliación del aeropuerto, centros comerciales, aparcamientos municipales...

Entre las segundas tenemos los taxis colectivos, los carriles bici, las furgonetas colectivas, los microbuses colectivos, los bici-taxis...

3. La Abducción

La primera de las neurociencias que vamos a analizar es la abducción. La Abducción no pertenece estrictamente al territorio de lo que solemos inlcuir como Neurociencias. Pertenece al territorio de la Epistemología. La Epistemología analiza las formas de adquirir el conocimiento. Es por ello un campo del conocimiento que vá más allá, recubriéndolo, del campo de conocimiento que conocemos como las ciencias. En especial el quehacer científico de las llamadas ciencias naturales adolece de un cierto déficit estructural, al obviar en general la Epistemología, conviertiéndose así, en un quehacer ciego, "con antojeras", como sería viajar en un coche de cuyo motor no tienes la más mínima idea; aunque te sientas muy autónomo al volante, puede que al mínimo problema del motor, esa autonomía se vea disminuída hasta el punto de "dejarte tirado" en cualquier sitio.

Ya Auguste Comte predicaba el papel de la ciencia para el sostenimiento de la ideología del progreso. Este era definido como la mejora continua de las condiciones de vida de la humanidad (¿toda o en parte?). Y la forma de que esa "máquina de movimiento continuo" pudiera mantenerse a lo largo de un tiempo, en principio indefinido, era la ciencia. Como motor del progreso.

Resulta sumamente curioso que la ciencia haya presumido de objetividad, cuando su "búsqueda de la verdad" partía de un planteamiento claramente ideológico, y por tanto "acientífico", o cuando menos "pseudocientífico", (la ideología del progreso) como una "verdad-origen", una verdad básica, que como toda verdad, ya no necesitaba confirmación ninguna.

En todo caso ahora si estamos en condiciones de comprobar el grado de consecución de esa búsqueda de la verdad por parte de la ciencia. Por un lado tenemos "un suspenso catastrófico" para lo que llamaban progreso, pues a la vista está que según cantan los números, estamos yendo para atrás como el cangrejo. Ahora bien, como mantenemos en este artículo, existe "otra ciencia". Ciencia oculta en todo caso. Ciencia prometedora, en suma. De la que desgranaremos aquí tan solo unas cuantas espigas.

Si vivimos, o hemos vivido tiempos de bonanza económica para la investigación científica, ha sido en buena medida con ayuda del brazo "económico" de la ciencia. Pues si bien la ciencia se promulgaba como motor del progreso, el incremento exponencial del coste de muchas técnicas de investigación, sólo se podía mantener con ayuda de ese "brazo" económico que era la industria privada.

Por su parte, Los medios de masas tenían verdadera alergia a la ciencia, a juzgar por la escasez de contenidos serios en las distintas cadenas. Esa alergia sistemática tenía sus excepciones, encarnadas en tal o cual descubrimiento que sí aparecían como noticias aisladas.

En cualquier caso, el resultado de tanto analfabetismo científico acumulado, tiene ahora sus ventajas, pues al estar en la actual coyuntura de la sociedad y del sistema económico, no solo resulta urgente compartir todo este conocimiento científico, sino que este proceso de alfabetización científica, puede aplicarse sin esfuerzo, o con poco esfuerzo...

El progreso como ideología de avanzar indefinidamente (sin antojeras, sin mirar lo transversal) es quizás el mejor símbolo de la Abducción. Técnicamente estaBAmos abducidos por la ideología del progreso.

Ahora bien, dentro de la idea de Abducción se pueden diferenciar dos clases: Abducción Bipolar y Abducción Multipolar.

La Abducción Bipolar (por ejemplo el progreso) adopta la forma de un vector. Este vector es el eje de ordenadas del sistema cartesiano. Es como si ese eje fuese la única parte del plano que nos interesara, que nos abdujera. Nuestra mirada se dirije fundamentalmente hacia ese eje. Lo más importante. Ver el numerito junto al eje. Para atestiguar el valor de nuestro vector. Es decir, en el fondo, comprobar donde nos encontramos nosotros, como cuerpos, a lo largo de ese maldito eje.

Por ejemplo estos años de tumbos en la bolsa, las personas con acciones eso es lo que miraban.

En cualquier aula que se precie de "cientifica" las gráficas cartesianas resultan fundamentales.

Se podría decir que una sociedad abducida por un vector tan minimalista, es una sociedad bipolar. Pero al haber una de las direcciones preferentes en distintos observadores (unos quieren que suba, otros que baje), no solo nos encontramos con una polarización social, sino que esta polarización, a nivel individual, luce como una bandera monocolor, un solo destino, un solo deseo. Una sociedad bipolar alimentada por visiones alternativas monopolares. Dicotómicas. O para arriba o para abajo.

Pero el plano (aunque sea plano) tiene muchas más direcciones. Hay cuatro cuadrantes definidos por los dos ejes de coordenadas. Entonces es cuando podemos hablar de Abducción Multipolar. La Abducción Multipolar es definida como Abducción, a secas, por parte de los estudiosos de la Epistemología y del llamado método científico. Sí, digo bien. La Abducción, que hemos llamado "el penúltimo tabú de occidente", como forma de conocimiento fué recuperada en el occidente del xix por Charles S. Peirce. Y hoy día está implosionando exponencialmente en el campo de la inteligencia artificial, filosofía de la ciencia, etc... Resulta curioso que se diseñen hoy día robots de esos que salen en los telediarios con ayuda de la Abducción (Multipolar), mientras los seres humanos seguimos siendo robotizados a muy diversas escalas por la Abducción (Bipolar) que, ya no se trata nomás de una ideología perniciosa, sino de unas prácticas que afectan directamente a nuestra construcción sensorial como seres vivos, codomesticados a partir de unas técnicas que remontan allá por el siglo II, cuando empezaron a adorar una imagen plana en el interior de una iglesia rupestre.

De la iglesia rupestre hoy día hemos saltado a un sinfín de situaciones donde es muy fácil, ya, descubrir esta abducción. Por ejemplo en la cultura de la imagen plana. Por ejemplo en la carretera. Por ejemplo en las aulas esclavas. En los salones jerárquicos.  Por ejemplo en los telediarios y medios de masas. Por ejemplo en los libros. Allá donde se separa la realidad en dos bandos. Allá donde hay o se vislumbra un escenario. Una sociedad del espectáculo se carateriza por un escenario. O muchos.

Un bando reza, adora a, se ve abducido por, el otro bando.

Es una comunicación 1.0. del "ordeno y mando".

Otros deciden. Tú obedeces.

4. Las Neuronas Espejo

Las neuronas espejo impactaron tanto que enseguida se conocieron como "las neuronas de la solidaridad" o "neuronas Gandhi". Por cierto que si Gandhi aprendió la desobediencia civil de David Thoreau, a partir de su manual de desobediencia civil, sería lógico hablar de "neuronas Thoreau-Gandhi".

Las neuronas espejo disuelven en la práctica cotidiana de la comunicación la antigua frontera que trataba de definirnos como egos: como cuerpos individuales con límites concretos. Límites que parecían innegociables para toda una historia científica (neurocientífica) anterior, marcada por el reforzamiento de nuestra individualidad, y por la negación de los valores solidarios, frente a la competencia.

Las neuronas espejo implican la existencia de sinapsis que saltan a la torera la frontera del cuerpo individual del observador. Y no es que nos pongan en el lugar del otro, sino que nos ponen en una tesitura claramente holística, que no puede ser más que parcialmente explicada, a no ser que partamos de un sujeto más global, más allá de los cuerpos individuales. Las neuronas espejo nos situan en una tierra de nadie (para la antigua neurociencia afirmadora de la individualidad), una muy amplia frontera, donde el sujeto ya no es un yo sino un nosotr@s.

El Método práctico más sencillo para comprobar la existencia de las neuronas espejo es el metodo de paco bici. Estas en un bar. Empiezas a hablar sobre las neuronas espejo. Y de pronto "tu otro yo" hace como que se cae de la silla. Todos nuestros brazos se lanzarán al rescate del caído. respondiendo a una conexión nada individualista, mediada, como nó, por nuestros organos sensoriales: sonidos, miradas...

En el aula no circular estas neuronas se anquilosan. creo que se puyede adivimnar en parte por la mirada aquellas personas que tramajan en unas aulas o en otras...


seguimosssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss

"La Ciencia del Placer Compartiendo"

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